Magrena Choto
Madrid, 14 de mayo (EFE) .- «Sé que la vacunación no evita que me contagie, pero al menos puedo salir de casa con tranquilidad». Livia, de 70 años, salió de Venezuela hace seis años para reunirse con su familia en España. Pero sin residencia legal, vive como un inmigrante indocumentado, sin centro de salud.
En España, el 90% de las personas mayores de 60 años han recibido la primera vacuna y casi el 44% se han vacunado por completo. Livia todavía está esperando su turno.
«La atención médica en España no es universal», dijo a Eiffel Nivez Turienso, presidente de World Physicians. Se estima que Livia es una de cada medio millón de personas que viven en un país indocumentado y sin acceso a la atención médica.
Erica vive en España desde hace 21 años. En 2018, sus padres de Perú se unieron a él. Pero con un acceso limitado a la atención médica, está luchando por encontrar acceso a las vacunas para sus padres de 75 y 76 años.
«La compañía de seguros me dijo que no tenía ninguna vacuna y que estaba en manos del gobierno, así que me quejé», dijo Erica.
Finalmente, después de luchar con compañías de seguros y organizaciones de salud, pudo obtener la vacuna Govt-19 para sus padres. «En el centro de salud, tenía lágrimas en los ojos y creo que me lamentaron y finalmente me dieron una cita», le dijo a Eiff.
Otra barrera para las personas indocumentadas que buscan tratamiento médico es el miedo a la deportación. Después de trabajar tan duro para llegar a España, algunos quieren mantenerse alejados de las autoridades, incluido el sistema de salud pública.
#RegularizacionYa, organización que lucha por los derechos de los inmigrantes, se encarga de desarrollar programas de salud pública que tomen en cuenta a todos los colectivos, especialmente a los más vulnerables.
«Durante las epidemias, el Gobierno español ha incumplido su deber de establecer programas de salud que respondan a las necesidades de los inmigrantes indocumentados», dijo la organización a Efe, «poniendo en peligro no solo la salud de los migrantes sino la población en general».
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